La inversión en las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) accesibles -para personas con alguna discapacidad- contribuiría a reducir el déficit público como alternativa a los recortes, ya que por cada euro destinado a su diseño se recuperan ocho.
Es una de las principales conclusiones del informe elaborado por el Centro Nacional de Tecnologías de la Accesibilidad (CENTAC), al que ha tenido acceso Efe, que presentará mañana el secretario de Estado de Servicios Sociales e Igualdad, Juan Manuel Moreno.
El informe analiza los beneficios y el ahorro de costes que la inversión en tecnologías accesibles puede reportar al Estado como alternativa a los recortes y a la austeridad, a través de varios sectores "clave" como el empleo, la educación y la sanidad.
Respecto al empleo, estima que la implantación efectiva de TIC accesibles, además de lograr una mayor integración de las personas con discapacidad, permitirá un aumento de la productividad, un ahorro de costes, nuevos puestos de trabajo y la contención de gastos.
La cifra de empleados en este sector en los próximos años podría aumentar hasta los 218.000, lo que implicaría un incremento de puestos de trabajo del doce por ciento entre 2011 y 2020.
En la administración electrónica, el ahorro de los ciudadanos y empresas y los derivados de la reducción de cargas administrativas asciende en España a más de 3.100 millones de euros anuales y cada tramitación electrónica ahorra 75 euros a cada usuario.
Con los gastos en las licitaciones públicas relacionadas con las TIC accesibles se han generado, según CENTAC, 2.500 millones de euros en Producto Interior Bruto (PIB), el mantenimiento de casi 50.000 empleos y unos retornos a la hacienda pública de 400 millones de euros.
Por cada euro gastado en inversión y costes en la administración electrónica, se logran 8,2 euros de ahorro, indica el informe.
Además, según sus cifras, se ahorrarían 1,88 millones de toneladas de dióxido de carbono que se no verterían en la atmósfera.
En el ámbito sanitario, asegura que las TIC accesibles podrían ayudar a ahorrar "grandes cantidades de dinero" mediante el uso de determinados dispositivos y evitar las hospitalizaciones innecesarias.
En este sentido, cita como ejemplo un sistema tecnológico accesible que logra, a través de teleasistentes sanitarios, medir las constantes vitales del paciente y enviarlas electrónicamente para que un especialista evalúe la necesidades de que éste acuda o no a un centro hospitalario.
Su uso ahorraría a las administraciones un total de 2.000 millones de euros, según el CENTAC.
Señala que los proyectos basados en sistemas de monitorización de pacientes crónicos a distancia implican un ahorro medio anual de entre 440 y 660 millones de euros y en el caso de los enfermos por insuficiencia cardíaca electrónica además de reducirse un 34 por ciento la tasa de mortalidad, se reducirían los reingresos en un 63 por ciento.
En cuanto al ámbito educativo, el informe recoge un sistema por el cual los alumnos con discapacidad podían asistir y seguir las clases, que además cumple, a juicio del CENTAC, la obligaciones normativas en la materia.
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